El Ayuntamiento de Estepona aprueba en el Pleno Ordinario celebrado el 19 de enero de 2023, la ordenanza sobre Zonas de Bajas Emisiones para dar cumplimiento al Real Decreto 1052/2022 del 27 de diciembre del Gobierno central, a la Ley 7/2021 de Cambio Climático y Transición Energética y a la Directiva 2058/50/CE del Parlamento Europeo relativa a la calidad del aire.
Se trata de una normativa de obligado cumplimiento para municipios de más de 50.000 habitantes, que en la provincia de Málaga son: Málaga capital, Marbella, Mijas, Vélez-Málaga, Fuengirola, Estepona, Benalmádena, Torremolinos y Rincón de la Victoria.
Las Zonas de Bajas Emisiones tienen como objetivo potenciar un cambio en el modelo de movilidad, potenciando las alternativas más sostenibles y restringiendo el acceso a determinados vehículos por sus emisiones de partículas contaminantes.
El texto, que irá aplicándose en sucesivas fases hasta 2026, establece en Estepona la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) como la delimitada por la avenida de Andalucía, calles Tajo y Pilar de Farinós, avenida de San Lorenzo y frente litoral. Las zonas que la delimitan no estarán afectadas a las restricciones.
Está suscitando polémica entre los sectores que investigan la mejora de la movilidad urbana e interurbana la bonificación total (temporal, durante 4 meses) de los trenes de media distancia y cercanía, y de algunos AVE de corta distancia. Para no causar agravio en los territorios insulares, también se han subvencionado los servicios públicos de autobús en las islas. Mientras tanto, en zonas como la Costa del Sol, donde estas subvenciones no llegarán, el transporte público eficiente brilla por su ausencia (y del ferroviario, ni hablemos). En el caso de Estepona, el caos derivado de las obras en la Avda. de España y los atascos son permanentes. La movilidad es un problema anunciado desde hace décadas, al que se suma ahora el encarecimiento de los combustibles y la crisis energética. Como siempre y como casi con todo, vamos tarde.
En medio de todo este debate sobre movilidad urbana e interurbana que afecta a administraciones de todo rango y color (estatal, autonómica, provincial y local), y frente a soluciones más complejas que exigen fuertes inversiones, he calculado los tiempos de desplazamiento andando a los distintos centros educativos públicos de Estepona, en franjas de 5, 10, 15 y 20 minutos. Caminar es posible y gratis. Para los más jóvenes, tan solo habría que establecer las condiciones de seguridad para que pudieran ir solos, en grupos monitorizados. El tiempo invertido en el desplazamiento podría ser parte de la jornada educativa.
El ayuntamiento de Estepona ha puesto en marcha un servicio de alquiler de bicicletas y patinetes eléctricos en su casco urbano, que estarán distribuidos en las 32 zonas habilitadas para el estacionamiento:
Avenida del Carmen- Urbanización Seghers
Avenida del Carmen- Edificio Puertosol
Plaza ABC
Avenida de España cruce con avenida Juan Carlos I
Avenida de España- Plaza García Caparrós
Calle Terraza- Plaza Antonia Guerrero
Plaza del Ajedrez
Plaza Augusto Suárez de Figueroa
Parque de La Constitución
Avenida de España, plazoleta Ortíz
Avenida Andalucía – Antiguo Cementerio
Avenida Litoral- Estación de autobuses
Avenida Andalucía- Glorieta Guitarrista Paco Javier Jimeno
Avenida Andalucía cruce con avenida de Los Reales
Avenida Andalucía- Parque El Calvario
Avenida Andalucía cruce con avenida Juan Carlos I
Avenida Juan Carlos I cruce con Camino del Padre Cura
Camino del Padre Cura cruce calle Gregorio Marañón
Polideportivo El Carmen
Parque El Carmen
Avenida Puerta del Mar cruce con calle Carlos Cano
Avenida Puerta del Mar cruce con calle Ortega y Gasset
Calle Polonia – Parque de Los Niños
Avenida Juan Carlos I- Residencial Los Corales
Estadio de Atletismo
Campo de fútbol San Fernando
IES Mar de Alborán
Calle Guillermo Cabrera cruce con calle Espronceda
Calle Terraza – Comisaría de Policía Nacional
Conjunto residencial Sierra Estepona
Camino de Los Molinos- Centro de Salud La Lobilla
Camino Vereda de los Frailes cruce avenida Segovia
El servicio está compuesto por 125 vehículos, de los que el 50% son bicicletas eléctricas.
Los vehículos solo podrán estacionarse en los espacios autorizados y señalizados, de lo contrario no se interrumpirá la tarificación al cliente y podrá ser objeto de una sanción por parte de la Policía Local.
Por otra parte, la empresa dispone de un servicio que permite la desactivación automática y telemática de cada VMP cuando se detecte que están circulando en entornos restringidos al tráfico rodado.
La empresa DOTT, concesionaria del servicio, informará a todos sus clientes mediante su operativa informática de las obligaciones de circulación y prohibiciones de estacionamiento establecidas en la normativa en vigor en cada momento. En la actualidad, el Reglamento General de Circulación fija en 10 kilómetros por hora la velocidad máxima en zonas residenciales y en 25 kilómetros/hora en vías urbanas y travesías, debiendo los conductores en cualquier caso, conceder prioridad a los peatones.
Los interesados en utilizar este servicio de transporte podrán hacerlo descargando la aplicación Dott. Después de tener instaladas la app en el móvil, los usuarios solo necesitan escanear el código QR de los vehículos para desbloquearlos. Para finalizar el viaje, los vehículos deben estacionarse en uno de los 32 espacios de estacionamiento que se muestran en la aplicación como ‘P’. Los usuarios deberán tomar una foto para asegurarse de que los VPM están estacionados correctamente.
Además de un aparcamiento ordenado, los vehículos adaptarán automáticamente su velocidad al entrar en zonas peatonales o residenciales, garantizando la seguridad de los usuarios y de los ciudadanos por igual.
La mayor parte de la energía que mueve nuestra sociedad se suministra fundamentalmente del petróleo, seguido del carbón y el gas natural. Excepto el gas natural, las otras fuentes energéticas ya han superado su pico, es decir, el punto de máxima de producción que permiten sus reservas naturales (también en el caso de las reservas de uranio, caso de la energía nuclear).
Respecto al petróleo y su caída de producción, de todos sus combustibles derivados, el que tiene más problemas de suministro es el diésel, porque solo se refina a partir de petróleo crudo (petróleo convencional), que es el más escaso (por eso actualmente proliferan técnicas como el fracking, que proporcionan petróleo no covencional -no válido para producir diésel-, poco productivas y no rentables, pero que se van tornando como las únicas alternativas para mantener el sistema). Esta escasez, además de la contaminación, es otra importante razón por la que en Europa se está obligando a retirar el parque de automóviles diésel.
La Agencia Internacional de la Energía ha pronosticado en su último informe, hace seis meses, que de aquí a 2025 se van a producir diversos picos de producción de petróleo por debajo de la demanda hasta en un 14%, que van a suponer problemas de suministro a escala global.
El diésel es la sangre de nuestro sistema económico ya que camiones, aviones o tractores funcionan con este tipo de combustible, por lo que este problema de suministro va a generar tensiones bastante importantes a escala global; conviene recordar, llegado a este punto, que las recientes protestas en Francia protagonizadas por los chalecos amarillos están motivadas por el plan para aumentar los impuestos a los combustibles.
El parque automovilístico en la Costa del Sol
La Costa del Sol occidental tiene un grave problema de movilidad y sostenibilidad que a corto y medio plazo podría tener consecuencias negativas para la convivencia.
Respecto a la movilidad, durante décadas, las administraciones y los políticos han simplificado el problema prometiendo la construcción del llamado «tren del litoral» (más de un siglo, si nos retrotraemos a la primera concesión del ferrocarril de Málaga a Estepona, en 1878, que evidentemente no llegó a construirse). Los ayuntamientos de todo el litoral occidental malagueño han gestionado sus políticas mirando para otro lado, como si la movilidad no fuese una competencia de la que fuesen responsables; en realidad, su estado es una consecuencia derivada de las políticas urbanísticas que desarrollan cuando, por ejemplo, la ampliación de los cascos urbanos y del extrarradio de sus municipios genera más necesidades de desplazamiento.
La movilidad debe ser una política preferente para todas las administraciones. Puede acometerse directamente (incidiendo en los medios de transporte) o indirectamente (evitando la necesidad de desplazarse). Es preferente porque un colapso en la movilidad desencadena multitud de problemas derivados del acceso a los suministros (incluida la alimentación), al trabajo, a la educación o a la sanidad, lo que a la postre supone también un problema de convivencia y de seguridad.
La Real Orden de 3 de abril de 1878 otorgó la concesión de un ferrocarril de Málaga al Campamento, pasando por Churriana, Fuengirola, Marbella y Estepona a D. José Casado, quien tenía un convenio con una empresa de capital británico, «The Málaga & Gibraltar Railway Company«, interesada en el proyecto por razones estratégicas, que contaba con una subvención del Gobierno de España de 60.000 pesetas por kilómetro. Este plano de fecha 25 de junio de 1878 es un detalle del proyecto para esta concesión que diseña todos los pasos de la línea de ferrocarril y de la carretera por los numerosos ríos y arroyos de esta montañosa costa occidental malagueña, en este caso sobre la desembocadura del río Padrón (Estepona)
Ante las eternas promesas y aplazamientos para la construcción del tren litoral en la Costa del Sol hay que ser realistas: la inversión estimada para su construcción, unos 4.000 millones, hacen inviable definitivamente esta infraestructura, pero esa dificultad no exime ni a las administraciones ni a los gobernantes de afrontar un análisis serio del problema de movilidad que tiene el litoral occidental malagueño y de abordar sus soluciones.
La realidad está ahí: son diarias las colas kilométricas a la altura de Benalmádena para acceder a Arroyo de la Miel, por ejemplo, siendo este solo uno de los varios puntos negros que tiene esta “ciudad dispersa” entre Málaga y Estepona (o Manilva), que concentra (junto al tramo oriental y al Guadalhorce) el 87.5% de la población de la provincia de Málaga y que genera 3.800.000 de desplazamientos diarios (PTOCSO 2006).
El ex-director General de Movilidad Sostenible de la Junta de Andalucía (2012-2015), José Luis Ordóñez, contrario al modelo del AVE, ya planteaba extraoficialmente hace más de una década adaptar la A7 incluyendo un carril exclusivo para autobuses de tránsito rápido (BTR), con plataformas de acceso aéreas en las paradas, funcionando como un metro. Parece una alternativa buena y factible, tanto ambiental como funcionalmente.
Estadística de vehículos diésel en la Costa del sol. Fuente: Elaboración propia a partir de datos del Sistema de Información Multiterritorial de Andalucía (IECA, Junta de Andalucía)
A este escenario se añade el tema del combustible. En la Costa del Sol hay algo más de un turismo por cada dos habitantes censados. Del parque automovilístico total, el 54,51% de los turismos son diésel, porcentaje que se eleva hasta el 80,72% en el caso de las furgonetas, 97,28% en el de los camiones y el 99,62% en el de los autobuses. Si el diésel tiene los días contados, existe un grave problema a corto plazo.
El nuevo Plan de Ordenación del Territorio de la Costa del Sol Occidental
En la actualidad está en fase de redacción el nuevo Plan de Ordenación del Territorio de la Costa del Sol Occidental (POTCSO), que sustituye al anterior de 2007, anulado por el Tribunal Supremo en 2015. Este documento considera «totalmente descartado» el tren litoral.
El nuevo POTCSO marca unas directrices que a priori resultan interesantes para la movilidad: desarrollar sistemas de transporte público de alta capacidad y prestaciones (tranvía metropolitano), fomentar la intermodalidad, promover sistemas de transporte de elevada eficiencia energética y garantizar la vertebración del territorio.
Además de estas directrices, sobre actuaciones concretas plantea:
Liberación del peaje de AP-7 en todo el ámbito de la Costa del Sol Occidental
Conversión en «Bulevar Metropolitano» de la A-7, con configuración y diseño urbano, e introducción de plataforma reservada con capacidad para modo ferroviario (metro ligero)
Del estudio del documento preliminar parece que el objetivo que persigue el POTCSO no es tanto facilitar la movilidad como liberar la construcción al norte de la AP-7, dado que también propone menos protecciones ambientales, decisiones que justifica con un eufemismo al decir que el nuevo documento supone una revisión de las determinaciones del anterior POTCSO “que han podido quedar superadas por la dinámica socioeconómica y territorial del ámbito”. Pero en absoluto las propuestas quedan justificadas analizando las variaciones entre el Plan de 2006 (antes de que estallara la burbuja económica en 2007) y el del 2018: 12 años después del inicio de la crisis económica de 2007, este nuevo Plan libera más suelo del que estaba disponible en 2006. Al final, las verdaderas directrices que plantea son construir más, en vez de gestionar mejor lo que ya está construido, preservar el paisaje como garantía de sostenibilidad y de calidad para el principal motor económico de esta zona -el turismo- y restringir los nuevos desarrollos urbanísticos.
La conversión de la A-7 en bulevar es una buena propuesta siempre que integre una vía rápida para autobuses, de tal forma que los desplazamientos en transportes colectivos sean una verdadera alternativa a los tiempos que se emplean actualmente en los desplazamientos interurbanos. De otra forma, se generará un nuevo problema social, dado que parece improbable que la AP-7 se liberalice a corto plazo y porque la mayor parte de la población que se desplaza a diario no podrá pagar el peaje.
Ciudades con Zonas de bajas emisiones (restricciones de tráfico) y prohibición de circulación de vehículos diésel
La transición energética
El gobierno de España aprobó el pasado 22 de febrero de 2019 el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima 2021-2030, que contempla destinar 200 millones de euros anualmente entre 2021 y 2025 para fomentar la compra del coche eléctrico y la creación de infraestructuras. Su intención a medio plazo es prohibir los vehículos movidos por combustibles fósiles en 2050 y su venta a partir de 2040. De una forma o de otra, las grandes ciudades (Francfort, Roma, Copenhague, París, Roma, Viena o Madrid) y países europeos está dando pasos en esta línea, pues es un compromiso que firmaron en Paris en 2015 (COP21) y que articularon en la cumbre del clima de Katowice, en 2018 (COP24), normativa que deberá entrar en vigor a partir de 2020.
El problema de la movilidad en la Costa del Sol es necesario acometerlo ya, al margen del asunto de los combustibles fósiles con el que ha empezado este artículo, e incluso al margen de una posible sustitución por vehículos eléctricos, pues a fin de cuentas, su sustitución no reduciría el volumen total de vehículos. Es necesario consensuar soluciones y propiciar acuerdos políticos sin que se conviertan en armas arrojadizas de unos contra otros (por ejemplo, con el tema Madrid Central, que el nuevo gobierno que ha salido de las elecciones municipales del 26M quiere revertir).
La Mancomunidad de Municipios de la Costa del Occidental parece la herramienta adecuada para propiciar o forzar estas políticas territoriales, pero a día de hoy queda todo en buenas intenciones plasmadas exclusivamente sobre el papel. Hay que actuar ya.
Los centros educativos Simón Fernández y Federico García Lorca de Estepona participan en el segundo concurso “Ponte en marcha”, convocado por la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía.
El objetivo de este programa es promover la movilidad sostenible y hábitos saludables para lo cual, entre otras actividades, han elaborado un vídeo que pretende promocionar las actividades que realizan de tal forma que sean conocidas por el mayor número de alumnos/as, padres y madres, profesorado e instituciones activas e implicadas en Estepona y así conseguir extender la práctica la movilidad sostenible y los hábitos saludables. Enhorabuena a quienes lo promueven y participan en este programa.